jueves, 20 de enero de 2011

Túnez: el turismo como motor de desarrollo






Después de varios días siguiendo los acontecimientos que desde la antigua Cartago exponían el exílio y defenestración del presidente Ben Ali (curiosamente hacia Arabia Saudí y no hacia Francia como se había publicitado desde las esferas del gobierno)y apuntando que aún el proceso de reconversión del estado hacia unaa base más amplia es lento y está condicionado por los actores del entorno; no podemos dejar de señalar el papel que ha desempeñado el sector turístico durante la crisis.

Hemos visto como los grandes TTOO´s han alertado de pérdidas durante los primeros días, hemos presenciado como el cierre "express" del espacio aéreo apenas generó unos minutos en los informativos con el regreso de los primeros turistas europeos, pero sobretodo hemos leído y escuchado como desde los resorts de la costa tunecina se mantenía la calma y es que ni a Ben Alí antes, ni al gobierno de coalición entrante le interesaba que se resintiera la imagen de Tunez como ese lugar tranquilo al norte de África.

Así, hemos tenido una crisis en toda regla que acaba con un "presidente" en el exílio y un cambio de gobierno (en términos de análisis geopolítico podremos indicar si el descontento popular contra Ben Alí podrá enmascarar el desempleo y las precarias condiciones sociales en la que viven parte de los tunecinos lejos de la capital) tal y como se dió en Honduras (con la diferencia del apoyo populista del ejército y la presunta implicación de EEUU en la salida de Zelaya) o la crisis desencadenada en Costa de Marfil.

¿Cuál es la diferencia? sin entrar en los apoyos a ciertas oligarquías, esta claro que el Turismo en Tunez es demasiado importante en su economía como para permitirse un levantamiento popular no contenido.

Viendo la DW alemana (emite dual en inglés), se entrevistaba a unos turistas, que acababan de aterrizar no sé en que aeropuerto y se les preguntaba como habían vivido estos días en Tunez. la respuesta fue clara, "con total normalidad, pero teníamos ganas de regresar a casa".

En fin no confío mucho en un lavado de cara democrático desde la república norteafricana, máxime cuando lo que interesa es proteger el turismo e interesadamente se levantará la amenaza islamista para favorecer un gobierno similar al argelino.


Imagen del stand de Túnez en Fitur 2011, cortesía de www.losviajeros.com